Un disco óptico es un formato de
almacenamiento de información digital, que consiste en un disco circular en el
cual la información se codifica, se guarda y almacena, haciendo unos surcos
microscópicos con un láser sobre una de las caras planas que lo componen
Los discos ópticos en general tienen un diámetro de
entre 7.6 y 30 cm, siendo 12 cm el tamaño más común. Un disco típico tiene un
grosor de 1.2 mm, mientras que el largo de pista, la distancia desde el centro
de una pista hasta el centro de la siguiente, es en general de 1.6 µm
(micrones).
Un disco óptico está diseñado para soportar uno de
tres tipos de grabación: solo lectura, por ejemplo CD y CD-ROM, grabable,
posibilidad de escribir una sola vez, por ejemplo CD-R), o regrabable
(reescribirle, por ejemplo CD-RW. Los discos grabables usualmente poseen una
capa de grabación de tinte orgánico entre el sustrato y la capa reflexiva. Por
otra parte, los discos regrabables contienen una capa de grabación de aleación
compuesta de un material en cambio de estado, la mayoría de las veces Aginaste,
un aleación de plata, indio, antimonio y telurio